Si no lo sabías, existe un día considerado el más feliz del año. Tanto la ciencia como la superstición coincidieron en que fuera el 20 de junio y lo asociaron con el color amarillo. Es así que casi todo el mundo celebra el Yellow Day y aprovecha no solo para expresar felicidad, sino también para atraerla o compartirla con seres queridos.
Es un día para celebrar la vida y todo lo bueno que nos rodea, una bonita manera de difundir la felicidad y el buen ánimo. Los más entusiastas deciden, incluso, vestirse de amarillo.
Este color, comúnmente es asociado con la energía positiva y la luz del sol. Por lo tanto, es natural que un día dedicado a la alegría y el optimismo se vincule con esta tonalidad. Además, el amarillo también se relaciona con la creatividad y la claridad mental, lo que lo convierte en un símbolo perfecto para promover emociones positivas.
Pero seguro te preguntarás por qué es el 20 de junio el día seleccionado. Y aunque la razón podría ser simbólica o puro azar, también tiene que ver con la época del año. Coincide con que ese día despedimos la primavera en el hemisferio Norte, para dar la bienvenida al verano. Ello implica cambios notables en el clima, alza de temperaturas y días vacacionales.
Por otro lado, la astrología occidental asocia el color amarillo con el planeta Mercurio. Se cree que representa la comunicación, la inteligencia y la agilidad mental. Por lo tanto, el Yellow Day podría ser visto como un momento propicio para enfocarse en la comunicación clara, el pensamiento lógico y la toma de decisiones importantes.
No obstante, la importancia de este día no solo ha sido reconocida desde la astrología o la ciencia en general, sino también a nivel político. Desde 2012 se conmemora oficialmente el Día Internacional de la Felicidad, y así lo aprobó el Consejo de las Naciones Unidas.
Asimismo, el Yellow Day también se utiliza en entornos laborales o educativos para fomentar un ambiente positivo y motivador. Muchas empresas y organizaciones preparan actividades especiales este día, como proyectos de servicio comunitario. El objetivo siempre es el mismo: dar mayor relevancia a la felicidad y el buen ánimo, y extenderlos a todos los ámbitos de la sociedad.