Si te sientes abrumada con las responsabilidades del hogar, los niños, y de paso crees que tu marido podría estar haciendo mucho más para ayudarte, entonces probablemente padezcas algo similar -o lo mismo- que muchas mujeres alrededor del mundo.
Muchas madres luchan por equilibrar la carga de trabajo doméstico y la crianza de sus hijos. Pero lo peor del caso es que muchas de ellas, aunque cargan a solas con ese peso simbólico, ni siquiera son madres solteras. Por el contrario, les acompaña un marido irresponsable o abrumador, el cual pudiera llegar a estresarlas incluso más que cualquier hiperactividad infantil o crisis de los primeros años de vida.
Hace algunos años, Today encuestó a más de 7000 madres estadounidenses sobre su principal fuente de estrés. Para sorpresa de algunos, el 46% de ellas señaló que sus maridos eran el verdadero reto en el hogar. Y una de cada cinco dijo que no recibía ayuda de su pareja para cuidar de la familia, lo cual suponía una doble carga de trabajo para ellas.
La tarea para estas y todas las madres, circunstancias aparte, no es nada fácil. Quien se atreva a minimizarla probablemente no entienda nada al respecto. Por eso te dejamos cinco consejos para impulsar un cambio de 180 grados en tu ambiente familiar y en tu relación de pareja.
Comunicación clara: Expresa tus necesidades y expectativas. A veces, tu marido simplemente no entiende cuánto trabajo implica el cuidado del hogar y la crianza de los niños. Explícale lo que te gustaría que hiciera y qué tareas te gustaría delegar.
Establecer turnos: Asegúrate de que ambos tengan tiempo para descansar y relajarse. Organizar turnos para las tareas domésticas y el cuidado de los niños puede ayudar a distribuir la carga de trabajo. Establecer un horario puede ser útil para que todos sepan qué se espera de ellos y cuándo.
Enseñar a tus hijos juntos: Educa a tus hijos y enseña a tu marido al mismo tiempo. Asigna tareas apropiadas para la edad y supervisa sus esfuerzos. Esto promueve la responsabilidad en los niños y permite que el padre se involucre en la educación.
Agenda familiar: Crea una agenda visible para toda la familia, con eventos, actividades y tareas domésticas. Esto ayuda a que todos estén informados y puedan asumir la responsabilidad. Además, al compartir la agenda, estás transmitiendo la expectativa de que todos deben contribuir.
Gratitud y reconocimiento: Celebra los éxitos y muestra gratitud cuando tu marido se involucra en las tareas del hogar. Reconocer sus esfuerzos fomenta la colaboración y la solidaridad en la familia.
Recuerda que la comunicación y la cooperación son claves para un hogar feliz y desestresado. Trabaja junto con tu marido y tus hijos para crear un entorno equilibrado y armonioso. Así, todos pueden crecer y aprender juntos.
*Con información de Ecuavisa