Si te has detenido a leer esto, ¡seguro que la curiosidad te carcome! ¿Hombres embarazados? Sí, es posible gracias al síndrome de la covada, también conocido como “embarazo simpático”. Pero no te preocupes, no es una nueva moda de Hollywood. Es un fenómeno científico real y te lo explicaremos a continuación.
El síndrome de la covada es un término utilizado para describir la situación en la que algunos hombres experimentan síntomas similares a los de su pareja embarazada. Estos pueden incluir náuseas, dolores de estómago, ansiedad y, en algunos casos, engordar y sentir los “golpecitos” del bebé. Así que sí: de alguna manera estos hombres se sienten “embarazados”.
Los primeros estudios sobre el síndrome de la covada datan de principios de la década de 1990, y aunque en un inicio se consideraba una rareza, actualmente se sabe que su incidencia es mayor de lo que se pensaba. Quizás suene divertido para algunas personas, pero es una realidad que requiere de cuidado y atención, tanto para la madre como para el futuro papá.
No hay nada de qué avergonzarse y es importante consultar la opinión de un especialista. Pero tranquila, que tu marido estará bien. Y no, no dará a luz ni compartirá contigo los dolores físicos del parto (qué lástima).
Los especialistas aún no están seguros de cuáles son las causas del síndrome de la covada. Algunas teorías sugieren que está relacionado con la ansiedad, el estrés y la empatía del futuro padre hacia la madre embarazada. Incluso, algunos estudios apuntan a que el síndrome de la covada podría estar relacionado con el cambio hormonal en el hombre durante la etapa prenatal.
Para lidiar con este “embarazo masculino”, lo más importante es la comunicación abierta entre la pareja, el apoyo mutuo y la participación activa del futuro padre en la gestación. Además, buscar ayuda profesional en caso de que los síntomas se vuelvan muy intensos y afecten la vida cotidiana del padre. Vivir el embarazo en pareja es algo inigualable. Compartirlo todo, hasta las náuseas, también es parte del proceso y del amor.
