Deja de hacer ruido: Vender es más rentable

Cuando tienes un negocio, es tentador pensar que cuanto más hables, mejor te va a ir. Que cuantas más veces publiques, más venderás. 

Pero lo cierto es que, en el mundo de las marcas, hacer ruido sin sentido te puede volver invisible. 

Para vender de verdad, necesitas algo más que volumen.

Necesitas autenticidad. 

Así que en este artículo vamos a ver cómo encontrar la voz de tu marca, cómo hacer que suene a ti y cuáles errores debes evitar para que lo que dices realmente se quede con tus clientes.

¿Por qué necesitas una voz auténtica?

Imagina esto: caminas por una calle llena de tiendas. Todas tienen el mismo letrero, los mismos productos en la ventana, las mismas ofertas. ¿Qué te hace parar en una y no en otra? 

La respuesta es simple: lo que te llama la atención es lo que se siente diferente. 

Pues es lo mismo con las marcas en redes sociales. Si hablas igual que todas, pasas desapercibido. 

Una voz auténtica es la que conecta con las personas, la que hace que tu negocio tenga algo que contar que nadie más puede replicar.

¿Cómo encontrar la voz de tu marca?

El primer paso es dejar de intentar sonar como otros. 

Aunque hayas seguido a marcas grandes, y admirado su forma de comunicar, es vital que no copies. Si lo haces, solo estarás añadiendo más ruido a un mar lleno de imitadores. 

Tu voz está en tu historia, en lo que eres y lo que ofreces. 

Te dejo algunos ejercicios para encontrarla:

1. Escribe una carta a un amigo cercano: Cuenta de qué va tu negocio, sin pretensiones ni tecnicismos. Imagina que estás tomando un café con esa persona y le explicas lo que haces con toda la naturalidad del mundo. ¿Cómo hablas? Esa es tu voz.

2. Haz una lista de tus valores: Pregúntate cuáles son los principios fundamentales de tu negocio. ¿Qué te diferencia del resto? Escribe tres palabras que describan a tu empresa. Luego, piensa en cómo esas palabras deberían sonar en cada mensaje que publiques.

3. Prueba el “espejo del cliente”: Pídele a un cliente o amigo que describa cómo ve tu marca. Luego compáralo con lo que tú crees que es. Si hay una desconexión, es el momento de ajustar el tono hasta que ambos coincidan.

¿Cómo hacer que tu marca suene a ti?

Tu marca no es un catálogo frío ni una lista de productos. Es una extensión de ti o de la visión que tienes para tu negocio. 

Para que suene auténtica, debes imprimirle tu personalidad. Para ello:

1. Habla como hablas en persona: Si eres simpático y directo, que tu marca también lo sea. Si te caracterizas por un tono más formal y reflexivo, que eso se vea en tus textos. Lo importante es que te sientas cómoda con lo que escribes. Porque si no es así, se nota.

2. Cuenta historias: Las personas conectan con historias, no con estadísticas. Si te pasó algo divertido mientras construías tu negocio, cuéntalo. Si has aprendido lecciones importantes en el camino, compártelas. Las historias humanizan tu marca y hacen que sea más fácil recordar lo que ofreces.

3. Evita las palabras vacías: Expresiones como “somos los mejores en lo que hacemos”, “calidad garantizada” y la tan gastada “ofrecemos el mejor servicio” ya no funcionan. Son tan comunes que no dicen nada. En su lugar, enfócate en los detalles que hacen única tu oferta y hazlo de manera genuina.

Lo que SÍ debes hacer

1. Personaliza tus mensajes: Cuando escribas para tu negocio, piensa que le estás hablando a una sola persona, no a un público masivo. Esto crea una conexión más íntima y hace que tus clientes se sientan valorados y comprendidos.

2. Sé consistente: Una vez encuentres el tono adecuado, asegúrate de que se mantenga coherente en todos tus canales. Tu página web, tus redes sociales y hasta los emails de atención al cliente deben sonar como una sola voz.

3. Haz que lo que dices aporte valor: No publiques solo por cumplir. Cada palabra que pongas ahí fuera debe tener un propósito. Ya sea educar, inspirar o divertir, asegúrate de que lo que compartes deja algo positivo en quien lo lee.

Lo que NO debes hacer

1. Ser parte del ruido: Publicar por publicar solo te llevará a abrumar a tus seguidores. Si no tienes nada relevante que decir, mejor guarda silencio hasta que lo tengas.

2. Forzar un tono ajeno: Si intentas sonar gracioso cuando no lo eres, o formal cuando vas más relajado, la desconexión será evidente. Tus clientes lo notarán, y lo peor es que perderás credibilidad.

3. Vivir de clichés: Frases como “el cliente es nuestra prioridad”, “siempre tiene la razón” y otras que seguro te sabes de memoria están tan gastadas que suenan falsas. Piensa en cómo puedes decir lo mismo, pero de una manera más personal y menos trillada.

Ejercicios para encontrar el tono de tu negocio

Ahora que ya tienes algunas ideas, te propongo estos ejercicios para que sigas afinando la voz de tu marca:

1. Filtro de palabras: Revisa los últimos tres textos que hayas publicado en redes sociales o en tu web. Lee en voz alta cada palabra y pregúntate: ¿Usarías esta expresión en una conversación real? Si la respuesta es no, bórrala y cámbiala por algo que te suene más natural.

2. Doble personalidad: Este ejercicio es para que explores los extremos de tu tono. Escribe una versión sarcástica y una versión sentimental de tu último post. Una vez hecho, busca el punto medio que sientas que se acerca más a tu personalidad de marca.

3. Lista de lo que nunca dirías: Haz una lista de palabras o frases que nunca utilizarías para describir tu negocio. Este filtro te ayudará a no caer en clichés ni en el “ruido” que queremos evitar.

Menos ruido, más impacto

La autenticidad no solo es una palabra bonita que queda bien en los manuales de marca. Es el corazón de lo que hará que tu negocio prospere. 

Cuando tu voz es clara y auténtica, tu mensaje llega más lejos y suena más fuerte. No se trata de publicar más, sino de hacerlo mejor. 

Deja de hacer ruido, enfócate en lo que realmente importa, y verás cómo vender se convierte en algo más rentable. Y lo disfrutas porque es parte de ti. 

¿Pruebas a ver qué tal te va? Estoy en Escríbete para escucharte.}