¿Todo lo que brilla es oro? ¿Esconden otra realidad las parejas que se dedican a publicar sus selfies románticas en el mundo virtual?
En la era de la tecnología y las redes sociales, la tendencia a compartir y exhibir la vida en línea ha aumentado significativamente. Pero ningún contenido se ha popularizado más que los posts románticos y, sobre todo, las selfies de parejas: momentos que parecen perfectos, llenos de amor, pero a menudo esconden una flagrante infelicidad.
El deseo de recrear una vida ideal en las redes sociales ha llevado a muchas parejas a representar una versión ficticia de sí mismos. A través de filtros, retoques y cuidadosas composiciones, estas parejas buscan proyectar una imagen de felicidad y armonía. Sin embargo: ¿cuál es el precio de esta exhibición?
Un estudio publicado recientemente arrojó que las parejas que ven pasar la vida a través de sus publicaciones en redes sociales son, al menos, un 128 por ciento más infelices que el resto de los enamorados que decide mantener un perfil bajo e íntimo con su relación.
A medida que las parejas se dedican a mantener una fachada perfecta en las redes sociales, su relación real comienza a sufrir. En lugar de vivir momentos auténticos y genuinos, se ven obligados a seguir creando ilusiones para sus seguidores. Esta situación puede llevar a conflictos, frustración y, finalmente a una infelicidad generalizada en la relación.
Además, la comparación constante con otras parejas y el deseo de mantener un estándar inalcanzable pueden generar inseguridad y ansiedad. A veces gritar al mundo que eres muy feliz y correspondido en tu relación no es tan saludable y exitoso como lo pintan.
Está bien que publiques o compartas algunos instantes con tus familiares y amigos, pero nuestra recomendación es que no lo vuelvas una obsesión. Lo que no se muestra es casi siempre mejor y más valioso que lo que tenemos siempre frente a nuestros ojos.
Antes de quedar bien con los seguidores virtuales, mejor atender a la persona que se tiene al lado y pensar en cómo hacerla feliz. Mucho más saludable que un par de likes entre una masa de desconocidos. ¿Quién tiene tiempo para actualizar su feed cuando es preferible dedicarle horitas extras a la pasión?