Rebecca Loos vuelve a ser el centro de atención. Su reciente aparición en el programa ¡De Viernes!, en la cadena española Telecinco ha reabierto viejas heridas y puesto en jaque la estabilidad del icónico matrimonio Beckham.
Con una serenidad que contrasta con su imagen de hace veinte años, Rebecca ha decidido hablar, no para crear escándalo, sino para aclarar su verdad. En el 2004, su nombre se convirtió en sinónimo de polémica en medio del matrimonio de la cantante y el futbolista.
Como asistente personal de David Beckham durante su etapa en el Real Madrid, Rebecca vivió una relación que comenzó con mensajes inocentes y terminó en una noche de pasión. En ese entonces, el matrimonio Beckham atravesaba una crisis. Según Rebecca, David llevaba una doble vida, marcada por necesidades que no encontraba en su relación con Victoria.
“Nos metimos en el coche con su conductor y un grupo de amigos, les dejamos en su hotel y cuando estábamos solos nos besamos. Nos besamos hasta su hotel, toda la Castellana. Subí y nos lo pasamos fenomenal”, reveló Rebecca en su aparición en la cadena española.
Durante su entrevista, Rebecca contó detalles impactantes, como el episodio en una fiesta organizada por Ronaldo Nazario, donde encontró a Beckham en una situación comprometedora. “Abrí la puerta y le dije: ‘your wife’ y me fui”, recordó. Fue entonces cuando entendió que no era la única en la vida del futbolista.
¿Qué ha pasado con la vida de Rebecca Loos?
Ahora, casada y con hijos, Rebecca busca cerrar este capítulo. Sin embargo, el reciente documental de Netflix sobre los Beckham ha reavivado el odio hacia ella. “Si no lo quiere admitir, que no lo admita, pero al menos que no me eche la culpa a mí. Somos dos”, sentenció.
“Yo ya estoy casada y tengo hijos, estaba alejada de este tema, pero él ha tocado un poco el asunto en su documental y la manera que él habla de la relación. De repente, me contacta gente por Instagram insultándome y todo el odio empieza de nuevo”, añadió Rebecca.
Rebecca Loos no quiere ser vista como la villana de esta historia. Su testimonio es un recordatorio de que detrás de los titulares hay personas reales, con vidas y emociones. Mientras los Beckham luchan por mantener su imagen pública, Rebecca busca algo más simple: paz.
