Ver a un niño sufrir de estreñimiento es de los momentos más tensos que puede padecer una madre, o una familia, durante el proceso de la infancia. Tiemblan, se retuercen, lloran, gritan y asumen con pavor el momento de entrar al baño. Eso, sin contar las graves consecuencias que puede traerles a corto, mediano o largo plazo. Desde problemas con la alimentación hasta situaciones mucho más graves que requieren la intervención de especialistas.
Es traumático, ¡sin dudas!. Quienes hayan vivido esas tensiones con los niños probablemente ya sean expertas en remedios caseros, medicamentos y comidas que favorecen el proceso de la salida de heces fecales. Muchas hacen una fiesta cuando sienten que el niño finalmente lo logró y, luego de eso, a veces descuidamos que es tan importante lo que comen para ir al baño, como lo que no deben llevarse a la boca.
Casi todo lo rico es también malo, dicen algunas abuelas. Y es verdad. El mejor ejemplo es el chocolate. Uno de los manjares universales, preferido por casi todos los niños, pero peligroso para los procesos digestivos.
A pesar de que muchas personas consideran lo contrario y asumen al chocolate como un aliado en la batalla contra el estreñimiento por sus cantidades significativas de fibra y sustancias químicas como la teobromina, que ayudan a estimular el sistema digestivo; lo cierto es que todo esto no es más que un mito.
La ingesta excesiva de chocolate puede tener efectos negativos en la salud de tu hijo, como obesidad y caries. Encima, no los ayuda con sus procesos de evacuación de heces. Sucede que es tan difícil limitarles su consumo que para muchas de nosotras se vuelve un verdadero dolor de cabeza.
Lo mejor es quitarlo de raíz. Pero como sabemos que esto podría ser poco menos que imposible, sobre todo cuando ya tienen edades entre los 3 y los 6 años, podemos administrarlo de forma moderada, e idealmente, siguiendo estos consejos:
1. Consumir chocolate en cantidades moderadas: Una pequeña pieza de chocolate puede aliviar los síntomas del estreñimiento, pero debes evitar que tu hijo se exceda en la ingesta porque sucederá lo contrario.
2. Chocolate de cacao puro: El chocolate de cacao puro contiene mayor cantidad de antioxidantes y menos azúcar, lo que lo convierte en una opción más saludable que el chocolate convencional.
3. Chocolate y frutas: Mezclar el chocolate con frutas como las frambuesas, las fresas y los arándanos puede aportar fibra y nutrientes adicionales para combatir el estreñimiento, además de ser una opción más sana y refrescante.
No obstante, lo fundamental es conducir a nuestros hijos hacia una correcta educación alimentaria. Motivarlos a conocer la importancia de una alimentación equilibrada y con varias fuentes de fibra, como verduras, frutas y granos enteros, para prevenir el estreñimiento y mantenerlos con una buena salud.